La operación de fimosis, ¿cuándo hay que operar?

A diferencia de lo que popularmente se cree, la fimosis no solamente afecta a los más pequeños, sino que los adultos también pueden tener fimosis. La operación de fimosis en adultos se conoce como circuncisión o postectomía y se centra en eliminar la piel que cubre el glande.

La fimosis es la dificultad o imposibilidad para retraer la piel del prepucio, es decir, la piel que cubre el glande y puede suceder tanto con el pene flácido como erecto.

Es importante no confundir la fimosis con las adherencias balanoprepuciales (entre la piel del prepucio y el glande) ni con un exceso de piel. Siempre que la piel del prepucio pueda descender sin ejercer presión o resistencia y se pueda bajar libremente, no hay fimosis.

Tampoco hay fimosis cuando el prepucio se puede retraer manualmente aunque no lo haga durante la erección.

La fimosis en niños: paso a paso

Todos los niños nacen con fimosis, es decir, con el prepucio y el glande unidos, es fisiológico y totalmente normal. A medida que pasan los años, los niños empiezan a experimentar con el pene ya que crece y empiezan a tener erecciones. Al ir estirándose la piel, las adherencias van desapareciendo. Aproximadamente, al cumplir los 4 años, se estima que el 80-90% de los prepucios descienden con total normalidad.

Aun así, en algunos casos permanece una especie de anillo que impide que la piel baje lo suficiente para poder dejar el glande al descubierto que también se acaba solucionando con el tiempo. En estos casos, una solución efectiva es aplicarse una crema con corticoides en la zona ya que un 80% de casos se acaban solucionando.

A modo de prevención, durante años se ha recomendado a los padres ir bajando la piel poco a poco, pero actualmente se desaconseja ya que puede provocar pequeñas heridas en la piel que al cicatrizar perderá elasticidad y puede hacer que se consolide la fimosis en los niños. Por lo tanto, se recomienda no hacer nada.

Estadísticamente, a los 17 años, solo entre el 1 y el 2% de los jóvenes presenta fimosis.

La fimosis en los adultos, ¿qué tipos de fimosis existen?

Se habla de 3 tipos de fimosis en adultos:

• Fimosis puntiforme, cuando el orificio prepucial tiene un diámetro mínimo, casi imperceptible. La piel circundante es de un aspecto y grosor dentro de la normalidad.
• Fimosis anular no retraíble o cicatricial, cuando la piel está endurecida y con un grosor aumentado. Normalmente se trata de un hombre que ha sufrido balanopostitis previas.
• Fimosis anular. Se clasifican dentro de este grupo, aquellos casos que no corresponden a los dos anteriores y en los que no se consigue la retracción.

Los adultos pueden haber nacido con fimosis, origen congénito, o bien haberla desarrollado más adelante, conocida como fimosis adquirida.

La fimosis adquirida aparece como consecuencia de haber sufrido inflamaciones del prepucio o del glande o repetidas infecciones en el pene. Todos estos sucesos han ido contribuyendo a la pérdida de la elasticidad de la piel que cada vez se va volviendo más fibrosa.

Por otro lado, el hecho de ser diabético incrementa la posibilidad de tener fimosis adquirida ya que se tiene mayor predisposición a padecer balanitis (inflamaciones en el prepucio).

Finalmente, existe otro tipo de clasificación para la fimosis descrito por Kayaba, que se basa en el grado de retractilidad del prepucio respecto al glande. En este caso hablaríamos de cuatro tipos de fimosis en los adultos:

• Tipo I, cuando hay una leve retracción pero sin lograr ver el glande.
• Tipo II, cuando la retracción es mayor que en el tipo I y se puede ver el meato uretral.
• Tipo III, si el glande queda medio expuesto.
• Tipo IV, cuando se puede ver el glande hasta la corona.

¿Con qué síntomas puedo detectar que tengo fimosis?

• Dolor al intentar retraer la piel del prepucio. La intensidad del dolor varía en función de lo estrecha que esté la piel.
• Dolor e hinchazón del prepucio al orinar.
• Dificultad para miccionar.
• Balanitis.
• Infecciones urinarias.
• Reflujo vesicoureteral.
• Retención aguda de la orina.
• Megaprepucio.
• Parafimosis. Sucede cuando el prepucio estrangula la base del glande impidiendo su movimiento y provocando su congestión. Ante este hecho se ha de actuar inmediatamente ya que al no pasar la sangre existe el riesgo de necrosis del pene.
• Molestias y dolor durante las relaciones sexuales.
• Alteraciones en la piel, como consecuencia de las infecciones, que aumentan el riesgo de padecer cáncer de pene, según varios estudios.

¿Cómo es la operación de fimosis en Madrid?

Normalmente la fimosis se resuelve por sí sola. Pero cuando el tratamiento con cremas de corticoides no funciona o bien la sintomatología es grave (dolor intenso, infecciones de repetición, parafimosis), entonces hay que recurrir a la operación de fimosis, circuncisión o postectomía.

El primer paso es hacerle una visita al especialista, quien tras realizarte una exploración física para valorar tu grado de fimosis, te indicará las pruebas preoperatorias que necesitas para poder realizarte la operación de fimosis en Madrid sin problemas.

La operación de fimosis es sencilla, rápida (dura alrededor de 30 minutos) y se hace bajo anestesia local. En el caso de los niños, se valorará cada caso para saber si es necesario utilizar anestesia general o no.

Primeramente, el cirujano comprueba si el prepucio puede retraerse hasta algún punto o es irreductible. Si no se puede retraer, se deberá hacer una pequeña incisión dorsal para descubrir el glande. Con el prepucio ya retraído, ya sea manualmente o mediante la incisión dorsal, el cirujano realiza otra incisión, en este caso en forma de circunferencia y paralela al surco balanoprepucial. Después se realiza otra incisión circunferencial siguiendo el mismo surco. Finalmente se retrae de nuevo el prepucio y se suturan los bordes.

En un centro privado, el precio de la operación de fimosis en Madrid suele ser entre los 800 - 900 euros. Pero gracias a ClinicPoint, que pone a tu disposición médicos y clínicas de referencia en Madrid a precios preferentes, el precio de la operación de fimosis es de 569 euros con un descuento del 33%.

El postoperatorio después de la fimosis

Una vez concluida la operación de fimosis en Madrid, podrás abandonar el hospital e iniciar la recuperación en tu casa ya que los cuidados de la herida y de los puntos de sutura son muy sencillos. De hecho, pasados tres días después de la operación de fimosis, puedes retomar tus actividades cotidianas con normalidad y, por norma general, al cabo de 15 días la recuperación es completa.

Para que el postoperatorio de la fimosis sea lo más breve posible, debes tener en cuenta unas recomendaciones:

• Es fundamental mantener la herida y las suturas limpias y secas. Durante la primera semana, de forma diaria, deberás realizarte curas con suero fisiológico y betadine y volver a tapar la zona con gasas.
• Puedes aplicarte hielo como máximo durante 10 minutos seguidos varias veces al día. Pero siempre de manera indirecta, es decir, sin aplicarlo directamente sobre las heridas.
• Deberás evitar el roce del pene con la ropa interior mientras tengas los puntos, lo que se soluciona utilizando prendas ajustadas.
• Procura dormir boca arriba para evitar presión y roces en el pene.
• Los puntos de sutura suelen caerse por sí solos pasados 10 días. Si pasadas 2 semanas aún no se han caído, el médico te los sacará.
• Es recomendable esperar entre 3 y 4 semanas antes de volver a tener relaciones sexuales.

Si tienes fimosis, hazle una visita al urólogo lo antes posible para poner fin a tus molestias con esta sencilla intervención. En ClinicPoint ponemos a tu disposición a los mejores profesionales para operarte de fimosis en Madrid. ¡Disfruta de tu vida más íntima de una vez por todas!